El parlamentario acusó que el Ministerio de Hacienda esconde cada año las deudas hospitalarias dentro del ítem 22 de bienes y servicios de consumo, sin glosa específica que permita fiscalizar qué servicios de salud están gestionando bien o mal sus recursos. “El fisco debe ser ejemplo y no un mal pagador”, advirtió Castro.

Viernes 14 de noviembre de 2025

En plena discusión del Presupuesto 2026, el senador y miembro de la Comisión de Salud, Juan Luis Castro, advirtió que el Ministerio de Hacienda “mantiene una práctica inaceptable: esconder la deuda hospitalaria bajo un ítem contable genérico, sin entregar transparencia ni trazabilidad a los parlamentarios que deben aprobar los recursos”. Según explicó, esta deuda —que supera los 150 millones de dólares en compromisos vencidos— está sumergida en el ítem 22 del gasto fiscal, donde se agrupan los bienes y servicios de consumo, “sin glosa, sin nombre y sin rostro”.

Castro enfatizó que este diseño presupuestario impide evaluar la gestión real de los 29 servicios de salud del país. “Los parlamentarios votamos todos los años un presupuesto a ciegas. No sabemos qué hospital administra bien sus recursos y cuál está al borde del colapso. Hacienda nos niega esa información y con eso protege la ineficiencia”, señaló. Según el legislador, esta falta de visibilidad perpetúa un ciclo de endeudamiento estructural que “asfixia a los hospitales y posterga tratamientos y cirugías”.

El senador también recordó que la deuda hospitalaria se traduce directamente en consecuencias para los pacientes: falta de medicamentos, suspensión de cirugías y escasez de insumos básicos. “Estamos hablando de jeringas, prótesis, marcapasos, antibióticos de última generación. Cuando el Estado no paga, los hospitales se empobrecen y los pacientes pagan la cuenta con su salud”, denunció. Agregó que los atrasos de pago ya superan los 180 días, el mayor nivel en más de una década, según datos recopilados por los gremios de proveedores y reportes de la carpeta Crisis Financiera de los Hospitales.

Para Castro, el problema es estructural y político: “Hacienda y Salud no se hablan. Uno pide más recursos, el otro responde que hay bajo rendimiento, y mientras tanto, los hospitales siguen con el agua al cuello. Si queremos premiar la buena gestión y corregir lo que falla, la deuda debe tener glosa propia en el presupuesto. Solo así podremos medir productividad y transparencia hospitalaria”.

El senador anunció que la próxima semana solicitará oficialmente una glosa especial dentro del Presupuesto 2026 que identifique y monitoree las deudas por servicio de salud, permitiendo premiar a los que cumplen y exigir responsabilidades a los que mantienen atrasos. “No podemos seguir repitiendo el mismo formato de oscuridad contable. La salud no se administra en penumbras”, concluyó.